Es más o menos medio día. Álex y
yo nos disponemos a salir.
Tenemos las armas, y hemos dejado
bien cubierta la entrada de la cueva, podemos salir.
Este es el plan:
Ali se queda, no puede ni
mantenerse en pie, pero necesitamos dos personas, ella puede curarse sola, solo
será un rato, si morimos, morirá ella también, a no ser que consiga sobrevivir
(que sería muy extraño)
Por si acaso, la hemos dejado un
botiquín, comida y una botella de agua.
Una vez allí, vigilaremos un poco
la zona, pondremos algunas trampas, y Álex se esconderá en unos arbustos de los
que rodean la explanada de la cornucopia. Cuando den el aviso de que podemos ir
a por las cosas, yo saldré corriendo hacia las mochilas y las cogeré.
Y si todo sale bien, doy media
vuelta y a la cueva.
Estamos llegando, todavía quedan
un par de horas hasta el atardecer, así que exploramos la zona.
La cornucopia está en el medio de
la explanada, preparada para que si salimos cualquiera que esté cerca nos vea y
no haya lugar donde esconderse. Alrededor de la explanada es como un círculo de
árboles y arbustos.
Pasa el tiempo y llega el
atardecer.
Suenan los altavoces.
“Queridos tributos de los 74º
Juegos del Hambre, el banquete está preparado, podéis serviros, y que la suerte
esté siempre de vuestra parte”
Lo primero que veo es a la chica
del 5, la de la cara astuta, salir corriendo de la cornucopia, coger su
mochila, e irse corriendo hacia el lado opuesto a nosotros.
Esa chica es demasiado lista,
llevamos aquí dos horas y no la hemos visto entrar en la cornucopia. Igual
hasta ha entrado mientras era de noche y ha pasado ahí toda la mañana.
Ojalá se me hubiera ocurrido eso
a mí.
No sé si salir ahora o no, tal
vez los profesionales estén esperado a que salga para darme caza, no sé.
Tengo que arriesgarme, o bien
eso, o esperar a que ya hayan cogido todos sus mochilas y se hayan alejado.
Pero para esto debe faltar mucho, o salir, o dejar a Ali morir en la cueva.
Y no tengo que huir. No hago más
que esconderme de los profesionales, y si quedo finalista, al final tendré que
enfrentarme a ellos y matarles de todos modos. Mejor matarles de un flechazo
que a pedrazos y puñetazos. Cuando salga uno, saldré yo también. Álex me cubre
las espaldas. Si vienen a por mí, él tira un alanza o un flechazo (más o menos
maneja el arco)
Pasa una hora, y veo salir a
Clove, la chica del 2. Es el momento.
Cojo la daga y unos cuchillos y
salgo corriendo hacia las mochilas.
Voy a medio camino, cuando veo
que a unos 20 metros, oigo gritar a Clove ¡Cato! Pero demasiado tarde , el
chico del 4 se acaba de llevar por delante a Clove, pero de qué manera. Con una
piedra que tenía en la mano, la ha partido la cabeza, literalmente. Pobre. Coge
su mochila y parece que se da cuenta de mi presencia porque me dirige una
mirada asesina que nunca nadie me había dirigido. Es el doble que yo, o salgo
corriendo y me escondo, o le esquivo, o me enfrento a él para acabar muerto,
porque si te enfrentas contra él no hay otra opción.
Decido dar media vuelta, pero
Cato viene hacia mí. Estoy dispuesto a hacerle frente cuando veo que pasa
completamente de largo, pasa a mi lado, pero ni me mira. Le veo arrodillarse al
lado del cuerpo de Clove, su compañera de distrito, su aliada. Y creo que en este
momento, acabo de dejar de odiar a los profesionales. Me doy cuenta de que,
aunque sean la mano derecha del Capitolio, ellos también viven esclavizados;
que aunque sean unas máquinas de matar, también tienen sentimientos, y a ellos
también les afecta toda esta mierda. Les da pena perder a sus compañeros, y
luego luchan por su distrito. Y en este momento, por lo que voy a hacer, se me
podría proclamar la mejor persona del mundo, porque, cuando el montruo del 4 se
dirige a matar a Cato le grito.
-¡Eh, subnormal, ¿te has
acobardado o qué?
Y me mira con una mirada de
asesino con la que nunca, nadie ha mirado a nadie. Y siento que soy una
hormiguita, como una hormiguita a la que un gigante está apunto de pisotear.
* * * * * * * * * * * * * * * * *
* * * *
-Tranquila,
Katniss, puede contra él.
-Pero, Prim, ¿tú
le has visto?
-Sí, Katniss,
Gale es muy fuerte, podrá con él, no llores. Nunca te había visto llorar,
excepto cuando murió papá, pero yo era muy pequeña y apenas me acuerdo.
Venga, Gale, tú
eres fuerte, eres increíble, tú puedes, ganarás, y volverás al distrito,
volveré a verte, volveré a estar contigo. Venga, Gale, tú puedes.
Tu blog está bastante bien! Quería decirte que estás nominada en el mio :D
ResponderEliminarhttp://vasallajedelos25.blogspot.com.es/
Gracias :3
ResponderEliminarno quiero presionarte pero... ¡¡¡hace un mes que no subes nada donde esta el otro capitulo?!!!
ResponderEliminarAAAY, Lo siento mucho jajaja, he pasado días fuera de casa, y con los exámenes y todo eso no he podido. Lo siento, intentaré subirlo pronto :3
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
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